Panamá se hace eco de una celebración mundial. Sesenta días después del Domingo de Resurrección, los católicos del mundo se acercan más al misterio del Cuerpo y la Sangre de Cristo mediante la celebración del Corpus Christi.
Esta celebración se realiza el siguiente jueves al octavo domingo después de la Pascua de Resurrección.
Históricamente, se conmemora el hecho de que mientras un sacerdote celebraba la eucaristía en la iglesia de Bolsena, Italia, al romper la hostia consagrada, brotó sangre. Este milagro ocurrió en 1263; sin embargo, no es hasta un año después, el 8 de septiembre cuando el Papa Urbano instituye esta celebración bajo la bula Transiturus hoc mundo. Aquel extraordinario acontecimiento se sigue haciendo eco en todos los cristianos del mundo.
En Panamá, bajo una mezcla de religiosidad y folclor, el Corpus Christi está vigente. Cada vez esta celebración cobra más arraigo, y eso denota en la creatividad y curiosidad en la que los villasoletanos aplican en los coloridos arreglos en las calles aledañas a la iglesia de San Atanasio, templo que guarda celosamente aquel dicho popular que reza que "tres jueves hay en el año que relucen más que el sol: Jueves Santos, Corpus Christi y el Día de la Ascensión del Señor.
VIVA, JESUS, EUCARISTIA.
Otra celebración paralela a este acontecimiento en Panamá es la Cita Eucarística, que es el encuentro de católicos panameños para manifestar su fe alrededor del sacramento del Cuerpo y Sangre de Cristo.
Hoy se cumplen 40 años de esta expresión cristiana. Se tiene previsto que se inicie la solemne eucaristía en la Arena Roberto Durán a las 9: 00 a.m. Este año, al culminar la celebración litúrgica se tendrá un acto para honrar a los fundadores de la Cita Eucarística, de la Cena de Pan y Vino, de la Campaña de Promoción Arquidiocesana y a los padres Fernando Guardia, Francisco Galende y monseñor Crestae Durán al conmemorar sus 50 años de vida sacerdotal.
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