Le escribe una mujer de 40 años que trabaja en una escuela privada muy prestigiosa.

En ese colegio conocí a un hombre que está muy bien económicamente, posee empresas, yates y viaja constantemente; lo malo del asunto es que es casado con una mujer de su posición social.

El problema no es que conocí a ese hombre, sino que me estoy enamorando de él por su caballerosidad.

Él ya se dio cuenta y me invitó a pasear un fin de semana al interior.

Lo que no sabe es que estoy casada con un buen hombre y con dos hijos hermosos.

Él también tiene obligaciones con sus cuatros hijos y su esposa.

Moza, ahora no sé qué hacer con él, no lo quiero perder porque es un hombre guapo, buena gente y sobre todo tiene dinero y me puede ayudar en mucho a pesar de que no paso necesidades.

No le digo mi nombre, ni el cargo que ocupo en ese colegio y menos cuál es, para guardar mi identidad.

¿Qué debo hacer para no salir afectada en esto?
La indecisa

ESTIMADA LECTORA
Te estás metiendo en un problema que puede causar la ruptura de tu familia y eso te dolera por el resto de tu vida. Aquí no hay nada que pensar, pues la solución es alejarte de ese hombre y punto. Piensa en tu familia y no en lo que ese hombre te puede dar.

Además, él solo te usará para sus necesidades pues tiene otras prioridades con su familia. Despierta de ese engaño y dedícate a trabajar bien para que te vaya mejor.

No te detengas a pensar en asuntos que no te ayudan a crecer como persona y como profesional.

Es hora de que sepas que lo más importante en tu vida es tu familia no una aventura que sólo traerá dolor.

Dedícate a los tuyos y dale ese amor que tienes, ellos se lo merecen.