Vive de la venta de lo que él ha denominado "artesanía callejera", que consiste en la oferta de pulseras, collares, piedras preciosas, amuletos, dijes fabricados con semillas de plantas exóticas y cualquier objeto llamativo e inusual.

Comenta este joven panameño que su nombre proviene de la legendaria y mística India, y aunque no sabe lo que significa cree que podría ser algo referente al trabajo, porque siempre le ha gustado ganarse su dinero aunque algunas personas crean que su labor no es seria ni remunerada.

Acoli comenzó desde muy chico, siempre le llamó la atención ver a otras personas cómo fabricaban este tipo de accesorios con simples semillas y piedras de diferentes tamaños y colores. Recuerda que aprendió viendo a los demás y más tarde comenzó a realizar estas manualidades en su casa para después decidirse y poner su pequeño puesto de venta "ambulante", el cual considera le ha traído mucha suerte.

Con mucha frecuencia se traslada al interior del país en busca de materia prima para fabricar "souvenirs"; de la misma forma encuentra las semillas y ramas con las que hace las famosas "redes" que sirven para atrapar en mitad del camino las malas vibras de otras personas.

Gracias a este particular arte, Acoli ha podido realizar grandes ventas, sobre todo a extranjeros que ya acostumbrados buscan en su mayoría las pulseras hechas con semilla y collares de piedras preciosas, dependiendo del signo zodiacal o de la suerte que desea le acompañe guardadita en su cartera.

Además del campo, Acoli recorre con mucha frecuencia las playas, montañas, la propia ciudad capital y hasta los bosques en busca de materiales para sus artesanías.

MISTICO
Acoli considera que las piedras preciosas transmiten poderes y beneficios a quienes las poseen.