Hola Moza, espero que estés bien y que Dios te bendiga. Te felicito por tu columna tan exitosa y acertada por tus consejos a los demás cuando lo necesitan.
La verdad, no sé qué hacer amiga Moza. Lo que me pasa es que no sé si es mala suerte en el amor. Mira, soy guapa, universitaria, de buenas costumbres, educada, atenta, muy cariñosa e inteligente y, bueno, no me ha ido bien, siempre me pagan mal y me siento muy triste, porque creo que los hombres están detrás de mí por mi guapa cara y mis curvas y, bueno, una vez me enamoré y me pagaron de la peor forma. Fíjate que mi gran amor se quedó con mi mejor amiga, pero pude superar todo este dolor. Ahora, este año conocí a un chico por Internet, muy apuesto, caballero y sincero, le escribí una carta muy tierna, ya que él hace lo mismo, y me encuentro con la sorpresa de que alguien me escribió, ¿quién? Su mujer.
Moza, tiene esposa y ella me dijo que están esperando un bebé y que me alejara de él, me insultó y me dio unas ganas de insultarla, pero como soy madura y una chica civilizada, no le falté el respeto y me puse en sus zapatos, porque a mí no me gustaría que me hicieran eso. No sé qué hacer, como ella le revisa el correo a él sin él darse cuenta, quiero escribirle y contarle todo y hablar de mujer a mujer. Quiero decirle que no tengo culpa y que me disculpe por no saber de su existencia ni de su embarazo. Él me mintió y me siento mal y quiero que me aconsejes y me orientes acerca de estos dos problemas que me tienen mal. No puedo dormir, yo sé que tú tienes un consejo para mí, y te aseguro que así lo haré. Gracias por tu ayuda y respóndeme pronto. La deprimida y desesperada.
TEN CALMA
Hola, ten paciencia. Te digo esto porque estoy segura que muy pronto encontrarás a la persona ideal con quien compartir tu vida.
Sobre ese hombre mentiroso, olvídalo, de nada te servirá escribirle a esa chica. Mira, las mujeres cuando están embarazadas no entienden ni razonan las cosas. Es mejor que la dejes y que ella descubra lo que tiene por sí sola, ya que tienes la conciencia limpia. El mentiroso fue él, no tú. Si algún día llega a buscarte personalmente, entonces cuéntale la verdad, pero mientras, no contribuyas a que tenga problemas con su embarazo, recuerda que un embarazo es riesgo. ¡Suerte!
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