Esto sucedió luego de que anoche, los residentes se tomaran las calles del sector y las cerraran, pero no con cartelones, sino con los mismos desechos que los perjudica.

Arrastraron colchones, cartuchos y todos los desperdicios que estaban regados afuera de las casas y que tenían días que no los recogían.

Niver Murillo, dueña de un kiosco y de un comedor infantil, confesó que es difícil atender en el negocio, porque la fetidez que está por toda la calle está en el aire y casi ni se puede respirar.

Otra preocupación es que en el sector hay muchos niños que juegan en las calles y están en contacto con los desechos.

Murillo reiteró que en varias ocasiones advirtieron del problema a las autoridades, pero ellos recogen la basura de vez en cuando y no hay programación.

Confesaron que pagan su tasa, por lo que no entienden por qué tienen este problema.

DIAaDIA llamó al alcalde, Héctor Carrasquilla para conocer su punto de vista; no obstante, luego de contestar la llamada e identificarnos, curiosamente se cayó la señal. Tras varios intentos, no se logró conocer su versión.

INSISTIRAN
Los moradores advirtieron que si siguen con el problema, volverán a cerrar la calle con basura.