Amaneció sin signos vitales. La casa de los esposos José Córdoba, de 34 años, y Bellanira Cruz, de 40, ubicada en la barriada 16 de Diciembre en Tocumen, se llenó de luto por la muerte de la integrante más pequeña de la familia.
Los padres dijeron a la Policía que se habían acostado a dormir en la cama junto a su bebé de tan sólo un mes de nacida, pero cuando José se levantó en la mañana de ayer notó que su hija no presentaba signos vitales.
Al lugar acudió personal de la Fiscalía para autorizar el levantamiento del cuerpecito de la infante.
SOLO ESCUCHARON LOS TIROS
En tanto que, tremendo susto se llevaron los residentes del sector H de Cerro Batea, cuando encontraron, en una de sus veredas, a un sujeto que tenía más de 15 heridas de arma de fuego en diferentes partes de su anatomía y la cabeza aplastada. Algunos moradores dijeron que alrededor de las 3:00 a.m. de ayer, escucharon detonaciones de armas de fuego.
Al lugar llegó una joven que decía ser la hermana del occiso, ella forcejeó con los uniformados con la intención de verificar si sus sospechas eran ciertas, mientras expresaba que él no andaba en nada malo.
Al final del oficio, los investigadores la dejaron pasar a verificar el cuerpo; una vez lo hizo, se retiró sin botar una lágrima y sin decir una sola palabra.
Por otro lado, en tanto en Cerro Cocobolo detrás del minisuper Emmanuel, a las 4:00 a.m. de ayer, la Policía encontró a un sujeto de generales desconocidas con un tiro en la cabeza.
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