"¡Ay!", "quítate", "Tiziano", "por favor, dame un abrazo", "¡ayyy!", "mi amor", eran algunas de las frases que se escuchaban ayer en la noche a la llegada del italiano Tiziano Ferro, quien hoy presenta su show en el Teatro Anayansi. Y es que, amigos, luego de esperar a este cantautor en el aeropuerto por más de una hora, las expectativas crecían, al punto que los curiosos que estaban allí sólo preguntaban: ¿quién viene?, y nosotros les decíamos, Tizano Ferro, a lo que muchos respondían: ¿y quien es él? Ja, ja, ja. Pero así como esas preguntas, también había respuestas jocosas como la de una linda rubia que no vaciló en decir: "qué pereza". Ja, ja, ja. Eso era un "chiqui show".
Pero lo curioso es que entre tanta espera, en menos de un minuto llegaron decenas de fans que imposibilitaron la labor periodística, ya que cuando vieron aparecer al intérprete de "Perdona", se le tiraron encima con ganas de besarlo, abrazarlo y de pedirle autógrafos, que las protestas de la "U" le quedaban chicas. Les digo que ese revulú provocó que en más de dos ocasiones el italiano se cayera y, peor aún, que la prensa no pudiera hacer preguntas coherentes y excelentes, además, la seguridad metía mano para cuidar el rostro del cantante, por lo que no podíamos poner la grabadora bien y preguntar. Con todo y eso se le hicieron un par de preguntas acerca de qué va a ofrecer hoy y, lógicamente, dijo que mucha música, movimiento y sabor. Esta llegada fue en un dos por tres, pues se lo llevaron como un flash. Amigos, el cantante estaba como asustado, y todo porque las fans se volvieron como locas. Imagínense si viene Brad Pitt.
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