Lo descubrí porque llamé a su casa y me contestó una mujer, diciendo que era su novia. Yo quería morirme.

A los días descubrí, por una amistad, que esa chica es unos años mayor que él, ella le lleva tres años.

Después de un tiempo hablé con Juan (ese es su nombre) y me dijo que me quería, que eso fue un desliz, porque para esa época peleábamos mucho. Es más, hasta me lloró y le creí.

Hace poco, conversando con una desconocida en un bus, por mera casualidad descubrí que trabaja en la misma empresa que Juan. Cuando le dije su nombre y su apellido, ella se asombró diciéndome que él tenía una novia allí. Para mi mayor sorpresa era la misma mujer con la que me engañó una vez. Jamás terminó con ella.

Lo dejé, pero él me volvió a decir que me quería, pero ahora no sé qué hacer.

JAZMINA
Estimada Jazmina, no puedo mandar en tu corazón, pero quiero que tengas algo bien claro: el que engaña una vez, engaña dos veces.

Ese muchacho es cínico, y como sabe que lo quieres, juega contigo.

Quiero que analices y le des gracias a Dios porque te encontraste con esa muchacha, pues si tienes tiempo de salir con ese chico, ¿cómo es que nadie te advirtió de la traición?

La otra chica es también una víctima de las mentiras, así que espero que no caigas en la mala práctica de insultarla ni de hablar mal de ella.

Te recomiendo que te des la oportunidad de estar sola para que sanes las heridas, tenlo por seguro que allá afuera, en el mundo, hay muchos hombres buenos, que no engañan.

Él puede que te siga buscando, pero los hombres como él no cambian; si quieres sufrir, sigue con él, si no, apártate de esa mala yerba.