Sofía Domínguez, activista de esta parroquia, fue una de las primeras personas que se dio cuenta de este lamentable hecho.

"Cuando llegué a la iglesia me di cuenta de que habían violentado la puerta de la casa del Santísimo, sacaron el Sagrario, habían regado en el suelo el cuerpo de Cristo. Además, que se introdujeron en la oficina de la secretaria, de donde sacaron el generador eléctrico", dijo Domínguez a DIAaDIA.

LA INVERSION DURó POCO
Según la parroquiana, el motor hurtado había sido comprado menos de 24 horas antes del hecho, con fondos conseguidos en colectas y ofrendas, y estaba destinado para la planta eléctrica que impulsaría el anda en el que estaría la Virgen del Carmen, en la procesión del 17 de julio.

REACCIONES
Carlos Ramos, párroco de la iglesia afectada, calificó el robo como un irrespeto a Dios, "ya que todo lo que hay dentro del templo es trabajo de la comunidad, que intenta mejorar cada día la iglesia".

Sentenció que más que la pérdida monetaria, "tomar el Sagrario, forzarlo, romper la capilla del Santísimo y regar las hostias fue lo más grave".

El párroco adelantó que las autoridades ya dieron permiso para el cercado de la iglesia.

REINCIDENTES
Según feligreses, esta capilla ha sido violentada en tres ocasiones.