La historia es que Miller llegó al Teatro Wyndham, en el oeste de esta capital, sin su costoso anillo de compromiso y al concluir la función de su obra "As You Like It" (Como Gustes), estalló en llanto al recibir el aplauso del público y salió corriendo del escenario. ¡Pobrecita!

La reacción de la rubia estadounidense fue atribuida por su familia y amigos a la humillación pública que le hizo pasar Law, al confesar haberle sido infiel tres meses después de pedirle matrimonio, y como dijimos antes, no es para menos si muchos dicen que es una mujer espectacular.

Fíjense que una actriz neoyorquina dijo: "Ella está que arde de furia. Tengo entendido que era una novia modelo. Dedicaba mucha energía a acercarse a los hijos de Law, pues pensaba que algún día sería su madrastra. Lo que ahora parece ya muy imposible".

Pero otras fuentes cercanas a Miller indicaron que no sólo la actriz, sino también toda la familia de ésta se encuentran furiosos con el galán británico y no desean verle más cerca de la guapa rubia que desde diciembre pasado era la futura señora de Law. ¡Qué metida de pata, Jude!