Te explico: Soy un hombre de 32 años, apuesto, inteligente y que le gusta trabajar; por ende, siempre tengo plata y los hombres se aprovechan de eso.

Me imagino que ya entendiste cuál es mi preferencia sexual, sin que te lo haya dicho. Pues sí, soy homosexual, aunque me da pena decirlo.

No sé qué pasó en mi vida, lo cierto es que hace varios años sufrí una decepción enorme con mi novia, a quien quería por sobre todas las cosas. Ella me dejó y por eso casi me vuelvo loco. Al parecer, cuando uno está vulnerable existe mucha gente viva que se aprovecha de eso y en lo que menos uno se da cuenta, queda involucrado en algo que jamás pensó.

Ese es mi caso y ahora que he llegado a sentir otras cosas en mi vida, como compartirla con un hombre, es muy difícil retroceder el tiempo.

Lo cierto es que jamás he vuelto a ser el mismo, pero tampoco puedo ser como ese hombre con quien compartí mi vida en esos momentos: fuerte, seguro y decidido.

Todos los hombres con quienes llego a tener una relación me usan sólo para sacarme dinero, y lo peor, tienen su novia a la que lucen como si nada.

Es muy duro, pero ya no sé qué hacer para que no me sigan chuleando. Estoy haciendo papel de estúpido y eso me hace sentir muy mal.

VUELVE A CREER EN TI
Gabriel, ¿sabes cuál es la clave para que no permitas que esos hombres abusen de ti?, pues volver a creer en ti. Sí, creo que tus problemas se solucionarían si por un momento vuelves a creer en ese hombre que eras; por eso te pido que seas fuerte, que pidas ayuda, que te conviertas en una piedra y que entierres a esa chica que te hizo sufrir. Cuando hagas eso, verás que ningún hombre más te chuleará y hasta harás de tu vida, borrón y cuenta nueva. Piénsalo. ¡Suerte!