Por ser el servicio una de nuestras principales fuentes de ingresos, el ser amable es una prioridad. Doce panameños opinan si somos atentos o, todo lo contrario, caemos en la grosería.
Rogelio Williams: "Todo depende de la persona con la que se conversa. He visto que eso se da en ciertas ocasiones, todo tiene que ver con la ocasión".
Roberto Peña: "Algunos sí lo son, se puede ver más en profesiones como la de los buseros".
María Montenegro:"Sí hay gente grosera. Los buseros son los más groseros; este mal lo he visto en todos lados".
Agapito Córdoba: "Hay bastante gente grosera, yo he visto más groseros en los autobuses".
Carmen Delamela: "Hay demasiados groseros, en las instituciones públicas abundan; sobre todo cuando van a pedir una información. Le quitan el buen humor a uno".
Aaron Batista: "Sí hay muchos. Los buseros son los más groseros".
Cenobia De León: "Sí hay bastante. En los buses los choferes son groseros".
Carolina González: "Hay bastantes. Me han hecho muchas groserías, pero no me acuerdo en estos momentos de ninguna".
Marcos Cordero: "Hay bastantes, me han hecho groserías en los buses y hasta en las empresas donde el gesto lo dice todo".
Basilio González: "Sí, la mayoría. En los buses los buseros son muy groseros".
Rocío Rodríguez: "Sí hay. Pienso que las personas deberían cambiar su forma de ser".
Doris de Barroso: "Sí hay mucha gente grosera, demasiadas.
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