El estado que presenta el mismo lugar donde deben estacionarse buses, taxis o cualquier vehículo para dejar a alguna persona, ahora representa peligro, porque los conductores del transporte público se niegan a parar allí por los grandes huecos y lodazales.

En ocasiones los buses dejan a los pasajeros en la misma carretera, porque tienen temor que al entrar queden sin llantas y amortiguadores, ya que muchos se han quedado parados y buscando cómo cambiar llantas o que una grúa los remolque.

Los moradores de los sectores que utilizan esa parada indicaron que ya han solicitado el apoyo para la reparación de ese tramo de carretera, pero no han logrado que les solucionen el problema.

Indicaron que la ubicación del paso elevado fue una gestión de los moradores del sector que estaban muy preocupados por los constantes atropellos y muertos, por lo que ahora pretenden lograr que les arreglen la parada.