Uno de los recursos que utiliza el director y escritor de las obras infantiles de Esquirla Kids, Agustín Clement, es la interacción de los artistas con los niños. Cuando los padres de Pulgarcito le preguntaron a los pequeños de la sala, si le daban permiso al hijo para que fuera a impedir la guerra entre las hormigas y las abejas, los pequeños emocionados respondieron que sí.
Luego, la acción se trasladó al reino de los insectos. Una abejita y una hormiguita habían sido expulsadas de sus casas porque no cumplían con los patrones establecidos por sus reinas; a las abejas les gustan las letras y a las hormigas, los números. Aquí inicia las aventuras de Pulgarcito, quien desde el primer momento cautiva al público con su vestimenta mexicana, saltitos y acento particular.
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