Herrera estaba de compras con su esposa y una sobrina, quienes ultimaban detalles de los preparativos del cumpleaños de su pequeño, cuando cinco sujetos los interceptaron y le dispararon en el estacionamiento de un supermercado de calle 14 Santa Ana.

Aunque Herrera logró dar algunos pasos, después cayó. Al momento del hecho, su esposa conducía el vehículo sedán, color rojo, con placa 104183 al que él subiría, pero no fue así.

Herrera vivía en el edificio 24 de Diciembre, ubicado en calle 26, El Chorrillo. Había sido detenido en el mes de julio por estar acompañado de una persona que tenía un arma de fuego en su poder.

Se presume que mantenía deudas pendientes con miembros de la banda El Pentágono, que opera en Santa Ana.

Algunas personas que estaban en el lugar murmuraban que "Pargolo" sabía que no podía estar en el sector de Santa Ana.

Familiares, vecinos y conocidos se acercaron al área del asesinato, en donde lanzaban lamentaciones y llantos porque querían estar junto al cadáver y no se les permitía.

A un lado, completamente destrozada, estaba la esposa de Herrera, quien no dejó de llorar y gritaba ¡ay Dios!

El cuerpo tenía un disparo en el tórax, dos en la axila izquierda, dos en el antebrazo, uno en el muslo y uno en el costado.