Un diamante en bruto. A pesar de la falta de recursos, la desnutrición y la falta de útiles escolares, Misael Quintero, de siete años, posee un gran talento para recitar y declamar poesías.
Este talentoso pequeñín vive en la apartada comunidad de Guayabal de Peña Blanca, en la comarca Ngöbe Buglé, en la provincia de Chiriquí, y estudia el segundo grado de la escuela que lleva el mismo nombre de la comunidad.
Sin ningún complejo, con un suéter verde, pantalón negro y unas botas de caucho, se paró delante de todos los maestros y sus compañeros, y empezó a declamar la poesía: "A mi mamá", del autor Juan Antonio Medrano Pujol.
Esta poesía, se la dedicó Misael con mucho cariño y como muestra de agradecimiento al personal de DIAaDIA, que visitó esta apartada comunidad para entregar mochilas.
"Cuando podré pagarte madre mía, tus trabajos, desvelos y constancias, pues luchando con piedad desde la infancia jamás supiste aborrecerme un día", salieron con mucha emoción del pequeño poeta.
Las artífices de que este niño, que apenas cursa el segundo grado, sea un gran declamador son sus maestras que no dudan en darle todo su apoyo para que vaya desarrollando su potencial.
Es tanta la pasión de Misael por la poesía que le encantaría poder participar en concursos de oratoria, pero lastimosamente para llegar a la comunidad donde llegan los carros para salir de la comarca, él tiene que caminar unas seis horas.
Esto no lo amilana, por eso continua practicando todos los días para estar listo para cuando llegue la oportunidad de representar a su escuela y dejarla en alto.
Además de ser un talentoso de la poesía es un excelente estudiante y sus buenas calificaciones lo respaldan.
DEDICADO
Misael no falta un solo día a clases, porque además de aprender recibe un plato de comida. |