La tierra donde vive está bendecida, pues al trabajarla puede subsistir.
Luzmila Rodríguez es una panameña carismática y muy optimista, que por su interés de seguir creciendo no se ha quedado en casa de brazos cruzados, frente a la ola de desempleo.
Ella es madre de cinco hijos, vive en la comunidad de Cerro Campana y sale de su casa a las 5: 30 a.m. hacia su puesto de trabajo en el Mercado Municipal de Capira y regresa a su hogar a las 3: 00 pm. El resto del tiempo se lo dedica a su casa. Aclaró que a esta actividad le dedica cuatro días a la semana.
Esta comerciante informal reveló que la mayoría de los productos que vende los extrae del patio de su casa, pues tiene una finca que sólo hay que hacerla producir.
Gracias a esta actividad, tiene dos hijos en la escuela secundaria y uno en primaria. Además de la alimentación y el pasaje de todos.
El mayor reto de la señora Luzmila es que sus hijos sean unos profesionales y que sigan superándose.
Relató que su primera hija es discapacitada y trata de darle todo el tiempo que se merece, sin descuidar todos lo quehaceres de su casa.
La Señora Luzmila quiso hacer un llamado a otras personas que se encuentran desempleadas en Panamá: "debemos salir a buscar el trabajo. Si nos quedamos en casa nadie nos va a llevar nada. Yo estoy aquí ganando mi sustento y sólo le pido a Dios que me dé salud y paciencia".
Finalmente dijo que aunque su jornada sea muy pesada, no mide sus sacrificios. Espera que ese mismo legado lo hereden sus hijos: Eliécer, Kelvin, Kenia, Lineth y Lorena.
FLORECITAS
Doña Luzmila también vende flores en su pequeño puesto y aseguró que vende las mejores.
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