Algunas de ellas, en ocasiones, están presentes en el niño

a, tales como: lectura lenta, períodos cortos de atención, inquietud, inversión de letras, números y palabras, pobre habilidad para recordar lo que lee, dificultad en el uso del renglón, dificultad para copiar del tablero, escribe hacia arriba o hacia abajo, lee hacia arriba o hacia abajo, dificultad para realizar ejercicios de llenar espacios. Además, las tareas le llevan mayor tiempo, confunde derecha e izquierda, presenta rechazo a leer, fatiga, cansancio y fracaso escolar, etc.

En las terapias se utilizan elementos sencillos como una pelota colgada de un hilo, un lápiz con un objeto para ser visualizado, un libro de juegos con colores, formas de objetos y números para hacer sus ejercicios.

A medida que los estudiantes van avanzando, se van aplicando diferentes actividades para que sigan progresando y obteniendo una buena visión.