Manifestó que realizó una inspección con el Departamento de Epidemilogía Nacional y local por esa apartada región y no se encontró evidencias de vómitos y diarreas.

Sin embargo, algunos de los familiares denunciantes sostienen que el deceso de los pequeños se registraron entre los meses de agosto y octubre.

De La Guardia destacó que personal de Salud se encuentra en alerta máxima para prevenir una epidemia, como ocurrió el año pasado.