La esquina
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Redacción
| DIAaDIA
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Un lector, motivado por un reconocimiento que se hizo en esta sección a una gerente de un banco por devolver un dinero de una cliente, llamó a esta redacción para exaltar la honestidad de una joven que laboraba en una empresa que ofrece servicios de limpieza en un casino de la localidad, y que encontró mil balboas mientras barría. Ella los devolvió sin vacilar, pero a los pocos días fue despedida de esa empresa por reducción de personal. Es una lástima que ahora esté sin empleo, cuando esa joven, llamada Sara, tiene una virtud tan valiosa como la honestidad.
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