Con el Chelsea destacado al frente del grupo, el Barcelona tiene en su mano la posibilidad de clasificarse, ya que le restan dos partidos en casa, aunque serán ante dos rivales duros: el líder de la Premier, el Chelsea, y el de la Bundesliga, el Werder Bremen. Por eso, ambos partidos cobran especial importancia.

Con los mismos puntos que los alemanes, los azulgrana tienen una buena oportunidad para encarrilar su pase frente a un rival que precisa un sólo punto para asegurarse su presencia en los octavos de final.

Después de perder en Londres y en Madrid, en una semana complicada para el equipo barcelonista, Rijkaard ha recompuesto anímicamente a su equipo.