A menos de una semana de haber sido habilitados los cuatro paños, hay quienes aseguran que el remedio ha sido peor que la enfermedad, pues la falta de señalizaciones ha ocasionado más de un choque en el área. Y ni decir de aquellos que se dan cuenta dónde quedaron algunas entradas cuando ya las han pasado.

Tal es el caso de la entrada de Ciudad Bolívar, donde un pequeño letrero informa que el conductor puede girar hacia su izquierda (si va en el paño hacia la ciudad). Así mismo ocurre en la entrada de La Cabima, y peor es en las noches, aseguraron.

A pesar de que en La Cabima hay policías de tránsito, la confusión sigue porque todos los carros quieren pasar a la vez. Pero el punto crítico está cuando finaliza el ensanche, ya que los conductores no se dan cuenta hasta que "están encima" y los frenazos son comunes, por lo que solicitan que a unos cuantos metros antes se coloque una señal que indique que la vía está próxima a terminar.

En tanto, la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre hace un llamado a los conductores para que no excedan el límite de velocidad que es de 60 km. por hora, para evitar accidentes.

Además, hicieron un llamado para que los conductores sean precavidos mientras culminen los trabajos del ensanche.

LO QUE FALTA
Aún no se han habilitado los puentes peatonales de Gonzalillo y Las Cumbres. También hay que hacer las paradas.