Tal vez no me entiendas, pero yo sí y estoy decepcionada de mí misma. Lo que pasa es que siempre he sido una chica cuidadosa, que no me se metió con ningún hombre así por así, por temor a contagiarme de una enfermedad de transmisión sexual, pero después que mi esposo, mi novio de toda la vida, me quemara y descubriera su infidelidad las cosas cambiaron.

Moza, soy una tonta , quería vengarme y de bruta no me fijé que no me estaba vengando de él, sino de mí misma. Imagínate que conocí a un hombre y me acosté con él dos veces, la primera con preservativo y la segunda no. Lo hice porque sentí que nada pasaría, pero después de eso, al mes me empezó una picazón que tuve que ir al médico. Allí conocí a un muchacho guapísimo, que cuando me vio llorando me dijo que lo tomará con calma, que son cosas que pasan y que si no era nada grave con tratamientos mejoraría. Él me ha estado ayudando y la verdad me recuperé de la tontería que cometí, pero quise escribirte porque sé que hay muchas mujeres como yo, que toman esas decisiones a la ligera.

Sobre el chico que conocí es el hombre más lindo que ha llegado a mi vida y no lo digo solo porque sea bien parecido, sino porque su trato hacia mi persona es excelente. No hay nadie como él.

Me alegra que hayas crecido

Sabes qué es lo mejor de lo que las situaciones que le suceden a uno en la vida, pues que uno aprenda de ellas y logre crecer. A mí me parece que tu has crecido, que ese chico te ayudó a entender que porque alguien jugó contigo es el fin del mundo. Espero que muchas chicas que lean esta columna aprendan la lección y analicen que si una puerta se cierra, muchas otras se abren y no hay que desesperarse y menos vengarse, porque eso sólo sería un error. ¡Te felicito y sigue adelante! ¡Suerte!