A él lo encontramos realizando su práctica profesional en una institución que se dedica a atender a personas con discapacidad.

CARISMA ESPECIAL
Todo lo que realiza lo hace siempre pensando en su desarrollo profesional, porque sabe que esa es la clave para lograr todos sus objetivos. "Cuando me asignaron el lugar donde debía practicar, me imaginé que sería un sitio en donde se realizaría poca actividad económica. Sin embargo, ahora, después de culminar la práctica profesional, agradezco a Dios por haberme traído a este lugar, porque he aprendido mucho", expresó Daniel con un gesto amable y agradecido con sus compañeros de oficina por sus consejos y lecciones. Este joven tenía entre sus responsabilidades recibir y despachar mercancía, archivar, contestar las llamadas telefónicas, entre otras actividades diarias.

VALEROSOS
Para Daniel lo más importante en esta etapa de su vida es ser un buen hijo, estudiar para recompensar a sus padres, que con mucho esfuerzo luchan para sacarlo adelante; no solamente a él, sino también a sus otros tres hermanos. "Mis padres me han inculcado ser una persona de bien, generoso y valeroso. Aunque en el camino me he encontrado con algunos obstáculos y retos, no he dejado de perseguir mis sueños, porque sé que algún día podré recompensar a mis padres", expresó Daniel.

BUEN HIJO
Para Pascuala Gil, madre de Daniel, él es el hijo que todo padre quiere tener. "Mi hijo es cariñoso, atento, no es grosero y, lo más importante, obediente". Aunque ella no cuenta con muchos recursos para continuar sufragando los estudios de su hijo, le gustaría que él culminara su enseñanza superior, porque según Pascuala, se lo merece.

CONTINUAR
A pesar de que Daniel vive en un área roja de la ciudad, no está en gavilla y es obediente, además, le gustaría continuar estudiando.