Según los científicos, no hay ningún motivo para abandonar el café, pues por el contrario, tiene más beneficios que efectos nocivos y tomarlo diariamente proporciona lo siguiente:
Reduce el riesgo de desarrollar diabetes, porque beber entre tres y cuatro tazas de café al día, disminuye el azúcar en la sangre.
Por su efecto diurético, ayuda a prevenir los cálculos renales y biliares.
Evita coágulos sanguíneos: Múltiples estudios han demostrado que el café no sube la presión arterial, ni afecta el ritmo cardíaco, ni provoca ataques cardíacos.
Por su efecto estimulante, ayuda a estar alerta y a concentrarse.
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