La Asociación Panameña de Magistrados y Jueces, a través de una carta dejaron claro su oposición a las reformas fiscales.

Los funcionarios judiciales no ven con buenos ojos que se eliminen los gastos de representación, incorporándolos al salario, pues el impuesto sería muy elevado y cobrarían menos dinero.

La ley no les permite ejercer el comercio ni tener un ingreso extra. Sólo pueden dictar clases universitarias, pero señalan que la remuneración es simbólica, y de prosperar las reformas ni siquiera podrían ejercer como docentes, debido a que el impuesto global sería muy alto.

La carta fue enviada también al magistrado presidente de la Corte Suprema de Justicia, José Troyano.