TRABAJO DE VERANO
Desde que tenía 11 años, trabajaba con su tío político como jardinero. "El trabajar en verano con mi tío me permitía ahorrar dinero y sufragar algunos de mis gastos escolares", manifestó Ricardo, el segundo de seis hermanos, quien recalcó que esperaba con ansias la época de verano, porque sabía que el trabajo honrado y tesonero le harían ganar un dinero que luego sería invertido en sus estudios.

AMOR AL PROJIMO
Cuando adolescente, Ricardo se enteró de que su vecino, un cardiólogo al cual él quería y admiraba mucho, le habían diagnosticado cáncer en el cerebro. Esa noticia lo impactó mucho. "Mi vecino siempre fue un gran apoyo, durante su enfermedad lo acompañé a sus citas, a sus terapias y esa experiencia fue la que me ayudó a entender que tenía que estudiar Medicina", contaba Ricardo, con una mirada nostálgica al recordar su pasado tan hermoso y a la vez triste, porque había perdido personas muy queridas, entre esas su madre.

VALIO LA PENA ESTUDIAR
El estudiar Medicina en Panamá es costoso, por eso Ricardo tuvo que trabajar para pagar sus estudios, y con la ayuda de su padre, logró terminarlos. Hoy se siente satisfecho por haber tomado la decisión de estudiar esta carrera.

"Mi papá siempre quiso ser doctor, por eso cuando él conoció mi decisión de estudiar Medicina, estuvo de acuerdo y me apoyó", dijo. En Panamá, en la década de los años ochenta, la población con discapacidad física iba en aumento, es por eso que él decide irse a México a estudiar Medicina Física en Rehabilitación para apoyar con sus conocimientos en esta área.

CONSEJO
Toda persona debe procurar su desarrollo personal, profesional y espiritual para lograr todas sus metas de vida de forma integral.