Dice que no ha renunciado, pero puso su cargo a disposición.
Así lo manifestó el secretario ejecutivo contra la corrupción, Cristóbal Arboleda, ayer, luego de una reunión que sostuvo con el Ejecutivo.
Arboleda considera que se debe nombrar a otra persona más especializada en su lugar, pero aclaró que su posición no tiene nada que ver con discrepancia ni presión del Gobierno.
El Secretario Ejecutivo contra la Corrupción comentó que una de las razones de su actitud podría ser el deseo de muchos comunicadores sociales que le han solicitado que haga ciertas investigaciones, e incluso las múltiples sugerencias de por qué no mete presos a ciertos funcionarios. Además, dijo que él no tiene herramientas jurídicas ni la capacidad para atender ciertos casos que le corresponden a instituciones y funcionarios con bases legales para hacerlo. En tanto, el presidente de la República, Martín Torrijos Espino, recibió tales apreciaciones e informó que en su momento formulará los anuncios correspondientes.
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