ENFRENTAMIENTO
A distancia, las unidades de la Policía custodiaban los actos de los manifestantes, quienes se sintieron intimidados y, en acción de protesta, lanzaron cuanto objeto encontraban en los proyectos en construcción para tirarlos a la Policía y sobre la vía. Fue entonces cuando el carro de los Pitufos entró en acción rociando a los quejosos. Éstos se atrincheraron en los proyectos de construcción, y a pesar de la cantidad de bombas lacrimógenas, no daban su brazo a torcer y seguían lanzando bloques, varillas de hierro y baldosas.

La misma acción se repetía en otro proyecto que está cerca al Banco Hipotecario. Los manifestantes lanzaban de todo, pese a que la Policía estaba a distancia. En ese tramo quedaron algunos carros encerrados y poco a poco avanzaban. El conductor más diestro y con suerte esquivaba los bloques. Otros no tuvieron esa dicha.

AFECTADOS
Los paños de la Avenida Balboa y la Cinta Costera fueron cerrados para evitar más daños, pero las personas, desesperadas por llegar a sus puntos de destino, caminaban exponiéndose a los objetos que lanzaban sin compasión los obreros. Muy cerca en una isleta que divide los paños de la Cinta Costera, ardía la hierba seca, pues una bomba lacrimógena cayó e inició el fuego. A pesar de que un Policía intentó con una rama sofocar el fuego, fue imposible. Cuando llegaron los bomberos, sólo les tocó mirar.

REVULU
En cuestión de segundos la ave Balboa se llenó de policías y carros patrullas. Luego de tres horas, las Unidades de Control de Multitudes de la Policía Nacional entraron al edificio cerca al Boulevard Balboa y sacaron a los manifestantes que estaban atrincherados en los edificios. Iban esposados y otros con zunchos en sus manos. Todos fueron trasladados a la Policía en Ancón. En total fueron 200 detenidos.

Ismael Ortega, abogado de los obreros, afirmó que los manifestantes fueron agredidos y respondieron. Además, según él, la manera en que entraron a arrestarlos no fue la más correcta y violaron sus derechos.

EVACUADOS
Los estudiantes de la Escuela Panamá School tuvieron que ser desalojados, porque estaban afectados por las bombas lacrimógenas.

Hubo dos personas que se quejaron por dañados a sus carros.