Sed de justicia. Elizabeth Duffus llora la muerte de su hijo menor Carlos Antonio Rodríguez, de 18 años, quien fue asesinado el viernes en la tarde en la esquina de su casa, ubicada en el sector 4 de Cerro Batea.
"Sé que a mi hijo lo mataron por algo, porque a nadie lo matan así por nada. Estoy consciente de que no pertenecía a ninguna pandilla y no consumía droga, porque lo lleve a hacerse exámenes unos días antes", dijo la madre.
Ella recordó que el día de la tragedia su hijo estaba conversando por teléfono, recostado a un poste que está frente a la casa, cuando dos sujetos pasaron y le dispararon.
Esta madre recuerda que gritó: "No me mates a mi hijo", le dieron siete tiros.
El pasado 2 de marzo Carlos celebró sus 18 años junto a toda su familia, pues estaba feliz que tendría cédula para poder trabajar.
Ahora esta familia pide ayuda a las autoridades locales para poder efectuar las honras fúnebres de Carlos Antonio.
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