Negocio es negocio. La que se quedará con las ganas de aumentar sus ganancias económicas por andar de "lenguilarga" será la cantante de raíces ecuatorianas Christina Aguilera. Al parecer, la empresa con la que iba a firmar un acuerdo para introducir en el mercado su propia línea de ropa desistió de hacerlo. Sucede que entre ellos había un pacto tácito en el cual la cantante aún no podía hacer público su nuevo negocio, cosa que no respetó.
Así como lo está leyendo, la intérprete de "Genio en la botella" abrió su boquita a una revista y le dijo todo el proyecto con lujo de detalles. Pero además de eso, la espectacular rubia, ahora nuevamente pelinegra, también dijo que la gente que se vestía como sus estrellas favoritas no eran más que imitadores. ¿Qué tendrá en la cabeza? Comentarios que molestaron aún más a los empresarios y echaron todo a la basura. Como ven, donde hay plata de por medio no hay amigos, y la Christina ahora se quedó sin ropa y sin plata.
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