Separare la ropa que no se pone, la que le faltan botones, zíper o la que está rota. Propóngase arreglarla y establézcase un lapso para terminar las reparaciones.

Bote la que no ha usado en los dos últimos años.

No acumule ropa que no le sirve, esperando adelgazar.

Deseche los disfraces y el vestuario que involucre recuerdos sentimentales, necesita espacio y es difícil que los vuelva a usar. Si son valiosos consérvelos en una caja y colóquelos en un lugar que no estorben.