¡Auxilio! Eso es lo que están pidiendo a gritos los residentes de la barriada Los Cántaros N.º 1 en Nuevo Tocumen, quienes temen que se desate una epidemia de dengue en la comunidad.
Las aguas negras son el problema más grande que enfrentan, pues se desbordan por las calles. A esto hay que sumarle el mal estado de estas.
Zoila Castillo y Lorena Castro, quienes tienen cinco años viviendo en la barriada, sienten que la inversión que hicieron para mejorar su calidad de vida no ha servido para nada.
Manifestaron que hace cinco años la planta de tratamiento de aguas servidas se dañó, por lo que se ha convertido en una gran tina de excretas.
Culebras, alimañas y hasta lagartos hay en las instalaciones de la planta de tratamiento, que es utilizada como basurero por personas ajenas a la comunidad.
Con suma urgencia, hacen un llamado a las autoridades de Salud y al representante del área para que encuentren una solución definitiva a las excretas, porque ya ni siquiera pueden comer en paz por el mal olor.
ORGANIZADOS
Los residentes se han organizado para no permitir que la gente tire basura en las plantas de aguas negras.
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