Jordi vino a este mundo el 9 de noviembre de 1999, y es el segundo hijo del hogar conformado por Imelda y Valentín. Ella vende artesanías, él trabaja en un club nocturno, residen en Arraiján y su sangre es milenaria pues pertenecen a la etnia kuna.

Como todos los niños fue travieso, pero sus juegos siempre giraron en torno a la música, nunca se le pudo comprar un carrito, una pelota o una bicicleta debido a su condición económica, por eso una guitarrita era su compañera. "Él nunca me pidió algo, si le comprabas un juguetito de dos dólares era feliz. Él podía ver a un a un vecinito con un juguete caro, y él no te decía yo quiero eso", recordó Imelda.

Sus entretenimientos consistían en jugar con su papá y su hermana Yeira al karaoke, donde interpretaba principalmente los temas de Pedrito Fernández, sobre todo la canción "La niña de la mochila azul". Entre sus primeras ilusiones estaba el aprender a tocar el órgano, por eso lo matricularon en el Instituto Nacional de Cultura (INAC), pero por falta de dinero no pudieron seguir llevándolo.

PRIMEROS PASITOS
Su primera incursión en un escenario fue muy precoz, sus progenitores se percataron de su talento cuando apenas tenía cuatro años. Valentín lo llevó al programa de Mingtoy, Stilos, pero todavía no estaba en edad para participar en el segmento infantil. Ese día le dijo a Jordi: "Yo, algún día, te llevo a la televisión".

El llamado "principito kuna" hizo sus pinitos en actividades realizadas por los kunas residentes en Arraiján, pero su prueba de fuego fue en primer grado cuando hubo un acto en el Club de Leones, destinado a las madres. Ahí cantó ante unas 300 personas y las maestras que estaban presentes lloraron por ver tanto talento en una criatura.

Las educadoras les pedían a gritos que lo llevaran a audicionar a Canta Conmigo, pero la economía era su barrera, hasta que la perseverancia y la fe ganaron.

LLEGA A CANTA CONMIGO
Este 2011 fue un año decisivo para Valentín y su hijo, porque contra viento y marea el padre decidió que iría con su hijo a la audición para Canta Conmigo que se realizaría en ULACIT. " A mi papá, Dios le dio un don que nos pasó a sus hijos, pero él no pudo darme esa oportunidad, yo se la iba a dar a Jordi", confesó.

Después de una larga noche de trabajo, el señor Alvarado no tenía para pagar el transporte para ir a esa primera prueba, por eso después de sus horas laborales cargó hielo para los saloneros y le pagaron cinco dólares, con eso bastó; le siguió un segundo obstáculo: qué taxi los llevaría, gracias a Dios llegó uno vacío, que no les dijo: no voy, y lo demás ya es historia, pues hoy se disputa el primer lugar.

JORDIMANIA
A raíz de sus impecables presentaciones, Jordi despertó una fiebre que supera los cuarenta grados. Llaveros, suéteres, tazas, hasta dulces se pueden encontrar a la venta con su rostro.

Arraiján y Kuna Yala se han unido para brindarle apoyo. El viernes se dio un baile en el que tocó Manuel de Jesús Ábrego, ayer hubo una caravana que recorrió todo Arraiján. El apoyo del alcalde y el representante no se hizo esperar.

Artistas de la talla de Miguel Ángel, quien cantó con el señor Valetín y Yomira Jones, también han estado presentes. Pero la tierra de sus ancestros es la que más se ha estremecido. Los bingos, en sectores como Narganá, Aligandí, Ustupu, Cartí están a la orden del día.

Un hecho sin precedentes es que el Congreso que se hace todos los domingos, por decisión de los sáhilas, será suspendido hoy para que todos puedan ver a este niño que se ha convertido en uno de sus orgullos y ejemplo para otros peques de que querer es poder.

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