José Luis Rodríguez, presidente de la ruta Las Garzas-La Doña, manifestó que esta nueva ruta los afecta a ellos llevándose los usuarios, y que ellos deben hacer una cuenta. Además que resulta una competencia desleal. Desde la mañana los conductores no prestaron el servicio, lo que provocó incomodidad a los usuarios, quienes tuvieron que caminar para buscar otra manera de movilizarse hacia sus destinos, mientras que los buses estaban estacionados en las aceras de la vía.

Pasar horas sin transporte molestó a los manifestantes, pues miembros de la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT) no llegaban a dialogar, y cerraron la vía.

Con diez minutos de anticipación, los policías informaron a los usuarios que caminaban que despejaran la carretera, ya que llegarían las unidades de Control de Multitudes y así ocurrió, pero en menos de lo que canta un gallo los transportistas movilizaron los buses y no hubo enfrentamientos, pero sí 10 transportistas detenidos.

Ellos informaron que el servicio de los 15 buses afecta las cinco unidades internas de Paso Blanco-La Doña, la 24 de Diciembre, Las Garzas y los 12 conductores de La Joya-Calle 12.

Víctor Vásquez, uno de los usuarios de esta ruta, dijo que el servicio que ofrecen es malo y esos 15 buses nuevos ayudan a movilizar a las personas en la mañana y la tarde.

Marcos Mora, asesor de la Dirección General de la ATTT, expresó que el permiso que les dieron a los 15 conductores es temporal, pues no es una ruta legal. Mientras tanto, los dueños de los buses afirman lo contrario.