Un rival que se pinta peligroso para el campeón. El español Sete Gibernau (Honda RC 211 V) marcó la pauta casi desde el principio y logró el mejor tiempo en las dos jornadas de entrenamientos libres que se completaron ayer en el circuito de Jerez, mientras que el vigente campeón, el italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1), acabó quinto a más de cuatro décimas de segundo del barcelonés.
Obligada mención requiere el hecho de que el reglamento para la presente temporada ha variado, y en la categoría de MotoGP sólo se realizará una sesión oficial de entrenamientos, la de mañana sábado al mediodía, por lo que todos los tiempos realizados a lo largo de la jornada del viernes no son más que una mera referencia para todos los pilotos, sin validez para configurar la formación definitiva de salida de cada gran premio.
A pesar de ello, la cara de Valentino Rossi al concluir sus entrenamientos no era precisamente halagüeña y circunspecto se bajó de su Yamaha para comentar diversos aspectos con hasta seis ingenieros de su equipo.
Ayer por la mañana Rossi se quedó a escasamente 83 milésimas de segundo de Gibernau, lo que no deja de ser una situación lógica, máxime si tenemos en cuenta que el piloto de Honda "juega en casa" y éste es un gran premio que siempre le produce un estímulo especial. La situación en la tarde fue radicalmente distinta.
|