POR NECESIDAD
Se inició en este negocio, porque no tenía quién le cuidara a sus hijos y decidió que podía dedicarse a la venta informal y de esta manera le daría tiempo para cuidar de sus 7 vástagos, sus edades oscilan entre los 3 y 12 años de edad. Actualmente, él vive en Betania, pero cada fin de semana se desplaza hasta esta área a comprar y revender plátanos al por menor.

SE GANA BUEN DINERO
Cada fin de semana, vienen los productores de plátanos al área de San Miguelito y algunos como Juan lo aprovechan para ganarse unos cuantos dólares. "Cada sábado vengo a esperar a los productores que nos dan un buen precio por la venta de los plátanos, lo importante es que no hay intermediario y por esa razón es que podemos venderlo a 10 unidades por un dólar", explicaba Juan mientras vendía casi al final de su jornada diaria.

MAS APOYO
Para él, el Gobierno debe darle más apoyo a los pequeños comerciantes, permitiéndoles que puedan vender sus productos en diversas áreas, de esta forma se evitaría que hubiera tanta delincuencia.

PROPIO NEGOCIO
Juan está haciendo algunos ahorros para tener su propio negocio de albañilería, él sabe que le hace falta mucho, pero no pierde las esperanzas, porque como él destacó: "Es lo último que se pierde".

MENSAJE
En Panamá existen muchas personas que como él, cada día se levantan a buscar el sustento diario, a esas personas, Juan les recomienda que sigan luchando, es cierto que la vida está dura y cara, pero que siempre se deben encomendar a Dios para que Él, les abra las puertas y entren muchas bendiciones en su vida".

DIFICIL
Lo más difícil para Juan en los días de la venta es el sol, hay ocasiones en que se encarecen los plátanos y en vez de venderlos en 10 por un dólar tiene que ofrecerlos a 8 por un dólar, cosa que disgusta a sus clientes frecuentes, porque están acostumbrados a comprar más por poco.

SU CUOTA
Cada día, Juan vende entre 2,500 y 3,000 plátanos.