La Cuca se infiltró en una televisora local y adivinen qué vio. Que un colega con nombre de ángel es un cepillo. Apenas vio llegar a su jefecita la alabó más que a Jesucristo. De milagro no limpió por donde pasaba. ¿Cómo está la jefecita más bella que hay? Joo, la 'tas botando.