Dorindo Cárdenas se ha ganado el amor del pueblo panameño; tanto así, que la mínima lesión que sufre es motivo de preocupación para muchos de sus seguidores, quienes desde el pasado Jueves Santo no han despegado el ojo de la televisión ni de los periódicos para saber cómo va mejorando "El Poste de Macano Negro".

Su recuperación es notoria y lo comprobamos ayer, en horas de la tarde, cuando su esposa Mary Rosa hizo la excepción con nosotros y nos lo pasó al teléfono, o sea que fuimos el primer medio de comunicación en conversar con el acordeonista.

En su voz se sentía la mejoría, de paso el enorme deseo de volver a sus quehaceres diarios, entre esos, subir a los escenarios. Su respiración era casi perfecta, entre las cosas que nos pudo contar Dorindo después de sufrir su arritmia cardiaca, es que desea de todo corazón ir al Festival de Vallenato en Valledupar, Colombia. Dios primero espera le den de alta hoy para preparar maletas y disfrutar de tan concurrido evento.

Ese festival se inicia mañana, y si todo sale bien, él viajaría el fin de semana, cuando posiblemente se presentará. No olviden que Dorindo es invitado todos los años a este magno acontecimiento.

Después espera seguir cumpliendo con cada uno de los compromisos pautados. ¡Qué bien!

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