Dejó el plumero. Sólo en el 2007, Rolando Mirones, director de la Policía Nacional, se enfrentó a 429 homicidios, 3, 367 robos con arma de fuego, 843 violaciones carnales, entre otros delitos. Pero ayer abandonó el cargo en el que debía asegurar la tranquilidad de los panameños, puesto que las cifras revelan la realidad que viven.
LOS DIAS CONTADOS
Mirones, ante su irrevocable decisión, dijo que hace meses había presentando su dimisión al Presidente de la República, pero tenía que terminar el período de "reingeniería de la Policía Nacional", que le había asignado el Ejecutivo para poder retirarse.
No obstante, no aclaró si tenía que ver con las diferencias que mantenía con Daniel Delgado Diamante, ministro de Gobierno y Justicia.
Mirones estuvo dos años y ocho meses al frente del estamento de seguridad. Antes de su salida, elogió los cambios de uniformes y de infraestructuras que logró en la entidad.
RECOMENDACIONES
Reconoció que hay que modificar las leyes para que se castiguen a los menores infractores, hacer un mejor control de migración y que las entidades de seguridad trabajen en conjunto.
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