Soy padre soltero hace cinco años, mi esposa falleció en un accidente. La he pasado muy triste desde su partida, pero he echado pa’ delante por mis pequeñas.

No le voy a negar que mi madre ha sido mi sustento y mi apoyo, pero no puedo abusar de ella pues tiene sus obligaciones.

Lo que me está pasando es que mi niña de 16 años se ha enamorado de un chico que no vale la pena, es vago, bebedor y sólo piensa en rumba. Ese muchacho vive cerca de la casa y se la pasa en la calle.

Le he dicho a mi hija que se aparte de él, ya que no sacará nada de esa relación. Por supuesto que se molesta y me grita, insulta y me dice hasta de lo que voy a morir.

Esto me tiene triste, pues veo a mi hija enamorada.

Y, como estoy preocupado, conversé con ese muchacho y de nada sirvió, me insultó y casi me golpea.

Esta situación me tiene mal y creo que lo más sano es mudarnos, para que mi hija estudie y no ande en malos pasos. Ella es una niña y no quiero que salga embarazada, ella es mi esperanza.

Jorge Tómalo con calma.

Estimado lector, entiendo tu preocupación, pero debes mantener la calma. Te felicito por estar pendiente de tus hijas, ya que eso te hace un gran padre.

La decisión de mudarte es muy apresurada, lo conveniente aquí es la comunicación que debes tener con tu pequeña, por lo tanto debes ser su amigo y si es posible confidente. Pero te aclaro, eso no se logra de la noche a la mañana.

Jorge, en cuanto a ese chico es mejor que no lo sigas enfrentando, mejor gasta tus energías en arreglar la situación con tu hija.

Hazle entender que se prepare para el futuro.

No te desesperes y dale la oportunidad a tu hija de que recapacite, ya verás que ella es inteligente y no te defraudará.