Cientos de ciudadanos de Quito, que se llaman a sí mismos "forajidos", festejaron el primer mes de la caída del poder de Lucio Gutiérrez con el denominado "concierto del cacerolazo", celebrado en el coliseo "Rumiñahui" de la capital ecuatoriana.
El pueblo ecuatoriano espera que no se repita este episodio tan nefasto en la historia del país.
|