Se rebelaron. Padres de familia de la escuela Melchor Lasso De La Vega, se tomaron el plantel y cerraron las puertas, debido a que no había respuestas a su problemática.
Ellos habían enviado una carta al ministro de Educación, Miguel Ángel Cañizales, donde daban un plazo de 48 horas para que resolviera, pero nada.
Desde hace meses, los acudientes se quejan de la actitud intransigente de la directora, Migdalia Suira, que persigue a un grupo de maestros, y de los malos manejos de los fondos de comida y la compra de la pollera, entre otras cosas, por lo que exigen un informe de auditoría que no llega.
Lo que más disgustó a los padres, fue el traslado del maestro de agricultura, Martín Angulo, que tenía diferencias con Suira. Manifestaron que desean la remoción de Suira al plantel.
Los estudiantes mostraban pancartas, en rechazo a la administración de Suira, quien llegó con personal de la Regional de Educación de San Miguelito, pero no los dejaron entrar hasta que Crespo llegó a la escuela.
Suira dijo que "el que tiene pruebas que lo haga de manera formal en asesoría legal". "Encontramos una copiadora en casa de una maestra, se está investigando", agregó.
Lila Paredes, maestra del plantel, afirmó que en la administración anterior se perdieron cosas, entre esas la copiadora, ella la recuperó y cuando se la entregó, no la quiso recibir formalmente. DIAaDIA pudo comprobar que la copiadora está en la dirección.
Luego de aceptar que se había llevado una computadora a su casa, Yorinda Cárdenas, subdirectora, acusó a una maestra de decirle "ladrona", algo que irritó a los padres de familia, porque eso no fue cierto.
Hubo una extensa reunión de dimes y diretes entre Suira, maestros y acudientes, mientras Crespo escuchaba las quejas y tomaba apuntes.
EN NADA
Al final, autoridades del MEDUCA se comprometieron a supervisar y buscar soluciones, pero no fue satisfactorio para los acudientes.
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