Nos cuenta Casís que todo se realizó luego de que se puso en contacto con los organizadores, y después de analizar todo, le dieron el "go", por supuesto que todo estaba bajo control, mucha seguridad.

'TABA ACULILLADO
Todo empezó a las 10 de la mañana, luego que Casís se pusiera el vestido contra incendio. "Ese es el único truck que tienen para llevar pasajeros. Una vez adentro te protegen bien, al punto de que pareces una parte más del carro, si se voltea tú te volteas, si sube, tú subes. Te digo que al principio tenía miedo y hasta me desesperé, pero cuando arrancó, es la adrenalina pura lo que se siente, pero allí se te va el miedo. Fueron como 7 u 8 minutos, y en ese tiempo, Madusa no perdió el tiempo pa' jodé, me sacaba la lengua, me pelaba los ojos y se reía", comentó Casís.

Al final, al camarógrafo le gustó y dijo que es una de las experiencias más "pritty" que ha tenido, a pesar de que luego se tomó algunos medicamentos porque se sentía aturdido. ¡Qué osado!