El inglés Henry Allingham, el más longevo de la Primera Guerra Mundial (1914-18), y considerado también el hombre más viejo de Europa, cumplió ayer 112 años. Allingham, miembro fundador de la Real Fuerza Aérea británica (RAF) en 1918 y el último superviviente de la batalla de Jutlandia, celebró su aniversario con una fiesta a la que asistieron sus cinco nietos y tres bisnietos.