Norma Pinzón, orientadora en el plantel, explicó que ese tipo de amenazas hace que los padres no quieran matricular a sus hijos por temor a que les ocurra algo. Aseguró que la violencia no solo es contra los estudiantes, pues hace días, a raíz que una docente le llamó la atención a una alumna, la madre de la menor de edad amenazó a la profesora.

UN MAL PARA TODOS
El Ministerio de Educación entregó recientemente a esta escuela un autobús, pero ya fue desvalijado por personas de la comunidad. Pinzón afirmó que se llevaron el aire acondicionado y el extintor. ¿Cómo hacen ese tipo de actos, cuando los más afectados son los estudiantes?, se preguntó.

Por su parte, Orieta Pittí, subdirectora del centro educativo, solicitó a las autoridades que les contraten más celadores. "Los cables de la telefonía se los roban; a raíz de eso no contamos con teléfonos y estamos incomunicados", denunció.

OLORES QUE MATAN
Al llegar al plantel se percibe un olor putrefacto. Era el basurero, en donde la comunidad deposita los desperdicios y, por no contar con una tinaquera, todos los desechos se riegan.

Los estudiantes manifestaron que el olor que emana de la basura llega hasta los salones de clase y eso les ha ocasionado náuseas.