Parece un mal de nunca acabar. Por más que se madrugue, las personas que residen en este corregimiento dicen que hagan lo que hagan, los buses hacen su recorrido aun cuando estén llenos, a falta de más unidades. "Las personas van guindadas en las puertas, pero no hay de otra, pues deben llegar a su destino".
Esperan que estas irregularidades sean tomadas por las autoridades locales, pues para eso fueron elegidas.
Por otro lado, en este mismo corregimiento dieron a conocer que en las paradas roban a cada rato.
Cuentan que "aunque sea a plena luz del día hay que estar pendiente de las carteras o de las pertenencias. El que menos piensas te roba".
¿Quién podrá poner orden en Las Mañanitas?
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