Por esto, los funcionarios de cada regional han recibido la orden de "poner mano dura" en cuanto a la extracción ilegal, salvo que esté seco, así lo confirmó Bolívar Pérez, subadministrador encargado de la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM).

YA CAYERON EN LA TRAMPA
"Al que sorprendamos con esa práctica le va a caer el peso de la ley", dijo Pérez, quien explicó que ya se han confiscado algunas maderas de cocobolo, así como algunos camiones están retenidos por la tala ilegal de esa especie.

La madera de este árbol es muy cotizada, sobre todo en los países asiáticos, para diversos usos como la mueblería.

Las sanciones van desde un centavo hasta un millón de dólares, además de otras de tipo penal.