En esta ocasión, padres de familia y docentes del colegio Jesús María Pla (JMP), ubicado en el distrito de Gualaca, provincia de Chiriquí, han amenazado con paralizar las clases durante la próxima semana, si las autoridades del Ministerio de Educación (MEDUCA) reintegran a sus labores como directora a la profesora Miroslava de Contreras.

La Comunidad Educativa de este colegio tampoco descarta la posibilidad de viajar a la ciudad capital para plantearle de viva voz al ministro de la cartera, Salvador Rodríguez, los problemas de infraestructura, inadecuado sistema eléctrico y hacinamiento en el que se encuentra el plantel.

Desde el pasado 26 de mayo, la directora fue separada de su cargo mientras se realizaban las investigaciones por presuntos malos manejos, a través de una auditoría general coordinada por la Contraloría de la República.

ESTRUCTURA EN PESIMO ESTADO
Erick Ortiz, coordinador de la nueva comunidad educativa, manifestó que desde el inicio del año escolar, muchos de los 570 estudiantes que asisten a este plantel educativo dan clases sentados en el piso, lo que les incomoda al momento de escribir sus apuntes.

Por otra parte, los baños tampoco están en buen estado; de los mismos emanan malos olores y pueden ser foco de epidemias.

Alegó además que los estudiantes del bachillerato en ciencias no pueden utilizar los laboratorios de física y química, porque no han sido equipados. "No vemos ningún tipo de inversión con los fondos del FECE", dijo.

INSEGURIDAD
Sumado a los problemas con los fondos, el personal docente, administrativo y los estudiantes viven en una constante zozobra, porque los paneles eléctricos están deteriorados y puede ocurrir una tragedia.

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