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Elisinio González G. | DIAaDIA |
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Había una vez, una hermosa niña con grandes habilidades para la gimnasia y el ajedrez. Era tanto su talento, que en ambas disciplinas había llegado hasta lo más alto del podio. Pero un día todo cambió... Es aquí donde se inicia la historia de Nicole Gabriela Arosemena: "La sonrisa del tenis". "Entré al tenis porque la Federación organizó una búsqueda de talentos. Recuerdo que tenía 10 años y gracias a Dios me seleccionaron", dijo muy sonriente Nicole, quien agregó que "quizás mi papá me inscribió porque a él le gustaba el tenis. Por algo me puso como segundo nombre Gabriela, en honor de la tenista argentina Gabriela Sabatini". Siempre con una sonrisa en sus labios, Nicole relató lo que hace para mantenerse en los primeros planos del tenis nacional. "Voy a la escuela en el turno de la mañana. Aprovecho cualquier hora libre para hacer mi tarea, para así tener más tiempo para entrenar en las tardes. Siempre tengo que organizarme para no tener problemas con mis estudios", enfatizó. SUEÑOS POR CUMPLIR
"Espero algún día convertirme en la primera tenista panameña en participar en un torneo importante como el Roland Garros o el Wimbledon. Por eso entreno fuerte todos los días, siempre con el apoyo incondicional de mis padres, quienes son mi mayor inspiración", precisó. Como cosa curiosa de la vida, Nicole mantuvo siempre una alegre y contagiosa sonrisa durante la entrevista. Por esa razón, DIAaDIA la bautiza desde hoy como "La sonrisa del tenis". EN AGENDA
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